viruses y mosquitos no quieren dejarnos

Un virus convive con nosotros hace casi ya dos semanas, va pasando de uno a otro indiscriminadamente, haciendo uso de nuestros inocentes cuerpos que luchan por superarlo y ahí vamos...

Ayer me tocó a mi y me sentí recontra mal como nunca me siento de mal, horrible, no me hallo cuando me siento mal, no sé sentirme mal.

Hoy ya estoy mejor, la alegría vuelve a mi. Pero mi marido me dice que no puedo ir al gimnasio después de lo mal que me sentí ayer. Creo que tiene razón.

Los chiquis siguen masomaso, como cansados y molestitos, a Félix le cuesta dormir, Bruno está afonico, con tos, cansado, y aunque no tienen fiebre se nota que no están bien.

Andrés se repuso bastante y hoy fue al jardín.

Brunito se quedó en casa y a la mañana le propuso a Felixcin:

- "¿jugamos a los dinosaurios Felixcito? ¨- dinosaurio en mano - "uuuu, uuuu, te voy a matar, uuu, uuu, te mato" -

y Felix: "ta ta ta ma ma ma " -

Bruno - "mami Felixcito dice "mamá", ¿viste?, pero el dinosaurio lo va a matar"

Yo: - "no, no dinosaurio, no te dejo que mates a mi bebe, yo lo cuido tanto que vos no lo vas a poder matar nunca"

Dejándole asi claro a Brunito, juego de por medio, que puede odiar tranquilo a su hermanito ya que de todas maneras no va a poder hacerle ningún daño, porque la encargada de cuidarlo es su mamá. Para alivianarle la culpa, ¿se entiende, no? .

Los mosquitos, como el virus, se ve que también se sienten a gusto en casa. No logramos erradicarlos, llegaron para quedarse, no hay espiral, ni tableta, ni aparatito nuevo que los intimide.

Hoy mi mamá me decía que deben poner huevos y por eso aparecen y salen volando de todos lados, escondidos debajo de los estantes... y puede ser... la onda fertilidad en casa se da bien.