Tuesday, November 04, 2008

entrega a los momentos

Algo que en general me resulta, algo que es casi una clave de la vida, es entregarme al momento y vivirlo hasta el final, incluso aunque no sea de lo más placentero.

Me entrego, me presto, me involucro y hasta trato de disfrutar de lo que tenga que ser, será.

El kilombo y el embole es más llevadero si lo dejamos estar, ... después pasa.

Pelear contra ciertos estados que se imponen genera más gasto de energía que dejarlos ser, transitarlos, vivirlos.

Si a veces no hay con qué darle, si no tiene sentido luchar contra lo que tiene que pasar.

No siempre me resulta fácil, caigo en la trampa más de lo que quisiera, pero de repente registro y reparo, cuando puedo y sino sigo en lucha un tiempo más hasta que me agoto y vuelvo a empezar.

Organización y crianza no van muy de la mano. Siento que en estos tiempos de chicos chiquitos se impone el desorden, lo inesperado, lo incontrolable, lo desconocido.
Y también siento que lo mejor es dejar que los sucesos me vayan guiando.

Es como que organización y crianza se excluyen la una a la otra.

No me sirve mucho tener todo rígidamente organizado, muchas veces la desorganización y la desestructura aparecen cuando menos me lo esperaba, y si no logro flexibilizar a tiempo, la cosa se pone re pesada y difícil.

En cambio cuando estoy más dispuesta a lo que venga y a lo que salga, a recibir, a dejarme llevar, a ver qué me traen los días, la paso muchísimo mejor.

Y no quiero decir con esto que no haya que tener ciertas rutinas, claro que sí, a los niños les vienen bien, los contienen, los acompañan, los ayudan a armar y a entender. Y a los grandes también.

Pero flexibilizar y entregarse al momento es muy positivo en el continuado existencial, creo que en casi todas las circunstancias. Y como ejemplo y enseñanza está buenísimo.

Por supuesto con algunas cosas se puede y con otras no, a veces se logra y a veces no, hay días y hay días...

... estos días tengo tantos pendientes, debo llamados, lecturas de blogs, comentarios, mails, respuestas, encuentros, cafeces y demases ... pero bueno... es un tiempo asi.

7 comments:

  1. Es como decíamos ayer: cuando uno tiene hijos ya no es más el jefe del hogar ni el dueño de su vida. Ahora hay una cooperativa y algunos de sus miembros, los de menor edad, son medio tiránicos. Son ídolos hermosos intolerantes, amados y combatidos a la vez...
    Besos

    ReplyDelete
  2. Anonymous8:22 AM

    Xime,
    uNA PROFESORA DE yOGA UNA VEZ ME DIJO ESTO QUE VOS DECIS DE NO "PELEAR" CON CIERTAS SITUACIONES QUE SE NOS IMPONEN ASI DE REPENTE CUANDO TODO PARECIA CALMO...ELLA DECIA "OBSERVAR.Y DEJAR PASAR" (porque pasa,)te hacìa la "super organizada",me sirve darme cuenta que hay mas a las que les pasa lo mismo!!! juaaa
    Hago de todo,estoy en sus cosas,en las de la casa,en el laburo,flia externa,pero sobre todo con ellos,pendiente que nada se me escape,y tengo a menudo la sensaciòn de no hacer lo suficiente,
    es decir,lo IMPORTANTE,
    que es pasar el mayor tiempo posible con ellos,pero relajada,disfrutàdolos

    ReplyDelete
  3. Que temita Xime.!!

    Los tiempos de crianza con chicos chiquitos me parecen incompatibles con algunas organizaciones también.
    Según el momento me ha sido mas fácil entender eso después, cuando la frustración por no haber podido con algo se me iba.
    En ocasiones me repetía a mi misma: "bueno, no puedo con todo"..
    porque lo que mas me ha costado es la autoexigencia de tener que poder, de organizarme y llegar con todos los pendientes...
    Me encantó la descripción de Ale de los de menor edad de la cooperativa...

    Y con el post anterior, con las sensaciones de cansancio, me sumo...época del año en la que siempre me pasa.


    Besitos Xime.
    Vero

    ReplyDelete
  4. Anonymous11:46 AM

    Buenísima intución la tuya, como siempre. Gracias.
    Es dificil hacer eso que dices, lo que nos sale es luchar y terminamos el doble de agotadas. Uf.
    Preciosísimas las fotos de tus hijos. La de todos juntos preciosa también.
    Guapos y vivos.
    Un beso desde Francia.

    ReplyDelete
  5. mmmmmmm A mi me cuesta, me cuesta mucho. Mira que es algo que no se manejar, lo estoy trabajando por mi salud mental, de verdad, o sino me vuelvo loca. Pero como cambiar esos habitos y mañas de toda la vida de un dia para otro? Yo soy recontra psicorigida y ahora pues con un bebe de 10 meses.... Lo positivo de todo es que el llego para enseñarme cosas, todo esto de lo que hablaste tal vez yo nunca me hubiera animado a hacerlo por mi misma, pero ahora esta el y bue... no puedo ser la misma de antes.
    Muy lindo el comentario de tu esposo.
    Abrazos

    ReplyDelete
  6. No sabes lo que cuesta dejar fluir algunas cosas, pero una vez que se puede, es como decis vos, se pasa el momento, el torbellino desde adentro. Del otro modo uno parece un espectador mudo que se desespera por opinar y nadie lo escucha y es eso lo que hace que el torbellina crezca y se alimente mas y mas.
    Adhiero al cansancio de fin de año, y adhiero a las ganas de hacer las cositas que me estan quedando colgadas...
    beso.
    moni

    ReplyDelete
  7. Xime
    No llego a escribirte todo lo que pienso cuando te leo, porque cada vez que vuelvo hay otra cosa más...pero no quiero dejar pasar más. Escribo en este por la sintonía de sensaciones. Yo también caigo en la trampa más de lo que quiero, y me veo envuelta ahí y no me gusta...me encantó el comentario de Ale y yo también pienso que a veces son muy tiranos los chicos! y uno quiere llegar con todo, y ojo que no hablo de super cosas sino de bañarlos a tiempo, tener comida lista, ropa preparada para el cole, responder a los pedidos del jardín...en fin...me gustaron mucho los otros post! a mi también me gusta mucho irvin yalom. Y adoro a Klimt!
    Bueno besos!

    ReplyDelete