Mito del origen del mundo

Tener hijos en Jardín de Infantes es una experiencia hermosa y enriquecedora.

Que mi hijo mayor esté ya en sala de 5 es un paso más que interesante en la aventura de criar niños.

Aprendo con él y de él en cada cosa que me cuenta, en las que veo y de las que participo. Estoy fascinada con esta etapa.

De El Jardín de la Esquina, tengo muchas cosas buenas para decir, muchas, muchas.

Lo que más me gusta y me importa es la calidad y el nivel de afecto con el que tratan a los chicos, el compromiso que generan con sus individualidades, el amoroso entramado grupal que logran, la libertad con la que los ayudan a crecer y la buena onda que se respira.

Quiero compartir algo que me re conmovió, algo que surgió como producto del trabajo de los chicos de la sala de Andrés, y me parece tan lindo que merece ser mostrado.

Es el Mito sobre el origen del mundo que ellos inventaron:

"Cuentan los nenes de sala de 5 que en el espacio exterior vivía un dinosaurio llamado Infinitosaurio.

El dios dinosaurio caminaba muy aburrido por las nubes que estaban en las paredes del universo.

Estaba tan aburrido y solo que se puso a crear:

Primero sacó fuego por la boca, ese fuego se hizo una bola que creció, creció hasta que se convirtió en el sol y le salieron bracitos que eran los rayos.

Como ahora había sol, Infinitosaurio empezó a tener calor y les pidió, a unos marcianos que pasaban por el universo, que le dieran un poco de agua, pero el agua se le cayó de las manos. Y de la gota gigante de agua caída en el medio del espacio se formó la tierra.

La tierra y el sol ya se habían formado pero le faltaba mucho trabajo.

Infinitosaurio se sentía muy solo, así que bajó a la tierra para hacer el primer árbol, que era un árbol muy poderoso, porque cuando creció, el dios dinosaurio hizo una persona con sus ramas. Por eso los humanos tenemos huesos y esqueleto que son en realidad las ramas del primer árbol que hubo en la tierra.

El calor seguía, se formó el vapor y esas fueron las primeras nubes.

Infinitosaurio ya cansado, tosía mucho y esa tos se convertía en lluvias de meteorito que caían en la tierra.

De tantas cosas que hizo se volvió viejito y se le cayeron los ojos, que se juntaron en el espacio y formaron la luna.

Por eso de noche cuando miramos al cielo y vemos la luna, en realidad es el dios dinosaurio que nos está mirando a nosotros."

¡¡qué belleza total!!, ¿no es una maravilla?

"chicos cantando..., chicos bailando..."

"Gracias a todos los que hacen que el paso de mis hijos por el Jardín de Infantes sea tan asi"