Friday, January 22, 2010

todo llega


Ando por ahí con mi nene grande y por momentos se me congela la imagen,
me veo madre de esa personita que ya tiene 6 años y me siento grande y me gusta,
pronto cumplo 39 y ya quiero empezar a decir 40.

Por estos días de verano que me copa aunque haga mucho calor y no lo padezco y lo prefiero muchísimo más que al invierno...,

me estoy dedicando a llevar a mi hiji mayor a hacer los aptos médicos para el ingreso a primer grado - foniatra, oftalmólogo, vacunas, pediatra, bucodental - y lo re disfruto,

caminamos, tomamos el subte, llegamos a los lugares, vamos solos él y yo, son momentos preciados, siento que le muestro el mundo, me pregunta cosas, de pronto paso y compro algo que necesito y él acota comentarios y me resulta un placer escuchar sus ocurrencias, su frescura, su amorosidad, entramos a un bar, tomamos un cafecito, me fascina escucharlo contándome lo que piensa, sus preguntas, cómo arma sus ideitas y saca sus conclusiones, se va apropiando de sus gustos y sus disgustos.

Flasheo totalmente con esta edad genial, 6 años, toda una vida de primeras experiencias acopiadas para siempre,
haciendo de base, colchón y trampolín desde donde partir y saltar a conquistar todo lo que se viene,

la escuela primaria, primer grado, cuánta expectativa, incertidumbre y abismo por delante.

Los chicos de esta edad son personas sabias por su autenticidad y su transparencia, por sus libertades, hay que cuidarlos mucho para que preserven lo más posible ese nivel de espontaneidad y ganas de vivir, de entender, de conocer, de poder y aprender y dar y recibir.

Como ante toda situación desconocida no se sabe el hacia dónde, ni qué es lo que se viene, ni lo que lo nuevo trae,

sí se siente lo que se va dejando, lo que ya no es, lo que deja de servir y conformar, lo que queda chico, y qué miedo dá,
qué importante es transitarlo con paciencia y confianza en uno mismo.

Quiero con toda mi alma aportarle eso a su vidita que comienza a salir a un mundo más grande y complejo,
que lo aborde con confianza, sabiendo que tiene un colchón enorme para recostarse, encontrarse y esperar en calma, que todo llega.



Monday, January 18, 2010

tentaciones de aquellas

Esté donde esté cuando escucho a un bebe llorar quiero ir a alzarlo, me sobreviene como un impulso contenedor,


más alla de las teorías...
eso me pasa,






en cualquier circunstancia si estoy en el mismo ambiente en el que un bebe o niño llora angustiado mi cuerpo tiende a acercarse, hacerle upa, contenerlo, calmarlo,



ahora mismo en este bar iría a decirle a esa señora que si ella está cansada yo puedo hacerle upita a su bebi con mucho gusto,
¿le caerá mal?

agotadoras satisfacciones


Algunos lunes a la mañana cuando salgo a retomar mi vida, esa parte de mi vida en la que dejo a mis hijos por un rato al margen, siento que el fin de semana me pasó por encima, que quedé arrasada.

Salgo de casa sola y respiro sin interferencias, bocanadas de amplitud y liviandad.
Los requerimientos de mis hijos, todos juntos, todos mezclados, acalorados y por momentos embolados, chiquitos, en plena formación de personalidad y de mundo, hay veces que me superan, me enojan, me agotan, me trastornan,

y paradógicamente me colman, me dan sentidos permanentes, me satisfacen, me enriquecen,
siento que criarlos asi, de cerca, con compromiso, es mi mayor misión en esta vida, me gusta hacerlo asi, me sale,
y veo que crecen tan rápido y que son pura cosecha y motivo de felicidad,

y que cada vez hay más ratos en los que puedo vislumbrar cómo será dentro de unos añitos cuando cada uno esté más en la suya y yo experimente eso que dicen las madres experimentadas que se siente cuando los hijos crecen,
eso de que se llega a extrañar esta etapa tan demandante!
¡Cómo es la vida!, no?

Mientras tanto mi intención personal es estar en eje, dispersarme lo menos posible, cuidar el presente y el hacia donde voy.

Friday, January 15, 2010

del dolor a la verdad - gabriel rolon


Leí el segundo libro de Gabriel Rolon "Palabras Cruzadas" Del dolor a la verdad.

Como no veo tele ni escucho radio no conocía a su autor por más que lo había escuchado nombrar varias veces.


Si bien tuve como un primer momento medio prejuicioso de sentir que el libro tenía algo de manual de psicoanálisis y entonces bla bla bla....,

lo que ganó en mi y se me impuso es la sensación de que el libro está muy bueno.


Está bien escrito, te lleva, las historias son interesantes, contadas con emoción, hay momentos conmovedores, es actual y respetuoso, da cuenta de lo que los buenos procesos analíticos son capaces de lograr, dejando bien claro, mostrándolo, que lo fundamental es el encuentro y la valentía del equipo terapéutico (terapeuta y paciente).


El subtítulo "del dolor a la verdad" me resulta totalmente certero y fuerte.


Muy recomendable para pacientes interesados en crecer y superarse.


Cito:


"Nuevamente aquella nena desprotegida había venido al consultorio y me pedía un abrazo. No es lo que los libros aconsejan a un psicoanalista. ¿Qué debía hacer, entonces? Pensé qué me pasaría si, fuera de mi consultorio, viera a una mujer en las condiciones en las que Luciana estaba. Y me dije que seguramente trataría de darle contención. ¿Por qué entonces, si haría esto con una desconocida, no iba a hacerlo con alguien que hacía más de un año confiaba en mí y que en ese momento me estaba necesitando tanto?"


"- Vos me dijiste que era una pena que yo no pudiera decir las cosas que estaba sintiendo. Que a lo mejor, si hubiera aprendido a hacerlo, me hubiera ahorrado muchos dolores. ¿Te acordás?

- Sí, me acuerdo.

- Entonces, pensar en eso me sacó de golpe de mi inacción."


"Apoya los codos sobre los muslos y deja caer la cara entre las manos. Decido intervenir sosteniendo un silencio prolongado.

Es extraño tener enfrente a una persona desbordada de angustia y, a pesar de haber pasado por esa experiencia tantas veces, no me siento capaz de describir las sensaciones que despierta. Es una vivencia indescriptible, imposible de ser transmitida, que colma el consultorio de un silencio pesado y engañoso. Porque, en realidad, es un silencio lleno de sonidos.

El llanto, la respiración agitada, el roce de la mano sobre el rostro, cada movimiento genera un rumor característico, único. Y en momentos como este he llegado a percibir incluso el latido de mi propio corazón".


"- Me iba sin pagarte. Perdoname. Me quedé enganchado con mi historia.

Sonrío y tomo el dinero. Tampoco yo me había dado cuenta del olvido. No solo Rodolfo había quedado con el pensamiento apresado por la imposibilidad de superar el dolor que le causaba la muerte de Valeria".


"Si bien el analista dirige la cura, el paciente guía la sesión. De manera que dejo que siga con su libre asociación de ideas y me guardo este tema para otra ocasión".


"Y si esto fuera así ¿se te ocurre cuál podría ser?

Se queda pensando.

- La verdad es que no - me dice desilusionado.

- No importa. No hay apuro.

Digo esto para que se relaje. Porque suele ocurrir que los pacientes muy ansiosos o demasiado exigentes consigo mismos se obligan a tener la solución inmediata de los enigmas que el análisis les plantea".


"- Gabriel - me había dicho cierta vez mi analista-, debe moderar su ansiedad. El sentido de las cosas se comporta a veces como la cola de los perros. Si usted lo persigue enloquecido, siempre se le escapa. En cambio si se relaja y camina tranquilo, lo sigue por detrás. O como decía otro gran maestro: no se desespere buscando, simplemente relájese y encuentre."


Copio mis señalados porque siento que sirve leerlos.

Tengo más pero hoy dejo por acá.



Monday, January 11, 2010

asi arrancó el 2mil10, bienvenido!!


Me gusta mucho enero en buenos aires,
tiene un ritmo especial, más tranqui, menos gente,
la ciudad hierve de calor pero no lo padezco demasiado,
me encantan las mujeres que andan en remeritas frescas sin importarles las formas más que la comodidad.

Paso mas tiempo en mi casa y veo y descubro que parar un poco me viene muy bien,
que mirar algunas cosas de lejos resalta y oscurece
y que está bueno captar esos matices que en la cotidiana a veces se pierden.

Que quiero tener más cuidado con algunas cosas y dejar que otras pasen un poco más de largo.


Mes de replanteos, de revisiones,
de armado del año que se viene en el que vislumbro cambios importantes y quiero estar presente, bien, bien presente.

Mi compu que siempre va conmigo en la mochila se rompió,
y por alguna de esas razones que a veces no se entienden del todo, no la estoy pudiendo hacer arreglar...

Lo cual me tiene desconectada del mundo blogger,
sobrevuelo facebook de vez en cuando, contesto mails medio rápido y se me pasan muchas cosas...
¡qué días raros!.


Estoy leyendo bastante más y me hace super bien,
me llena el corazón, el alma, me nutre, me conecta, me pierde y me reencuentra y me lleva de paseo.

Adoro leer, y cuando logro hacerlo unos buenos ratos seguidos me doy cuenta de cuánto lo necesito. Y cuánto hacía que no leía una hora entera sentada en un bar, momentos memorables...

¡¡bienvenido 2mil10 y los libros que me esperan!!

Ciertamente que la parte de la desconexión no es la que más me gusta, extraño el ida y vuelta, a los amigos de este mundo enorme y prometedor,
pero estoy poniendo en práctica ciertas renuncias, todo no se puede y este es un tiempo asi.


Tal vez pierdo algunos trenes en el camino, siempre algo se pierde.


De las enseñanzas de mis pacientes no me quiero perder, aportan mucho, acompañan y saben recibir. Ser terapeuta es una experiencia valiosísima, un privilegio a mi modo de ver.


Mis hijos crecen tan rápido que es del único tren que no me bajo por nada del mundo, que no me quiero perder, que quiero que no pase desapercibido.

Son tan y cada uno de ellos un universo tan único y especial, que no puedo más que sentir que es de lo único que con certeza no me quiero perder, de vivirlos de cerca, de olerlos, de acompañarlos y cuidarlos.


TUS HIJOS... Kahlil Griban

"Tus hijos no son tus hijos, son hijos e hijas de la vida deseosa de si misma.
No vienen de ti, sino a través de ti y aunque estén contigo no te pertenecen.
Puedes darles tu amor pero no tus pensamientos, pues ellos tienen sus propios pensamientos.
Puedes abrigar sus cuerpos, pero no sus almas, porque ellos viven en la casa del mañana,que no puedes visitar ni siquiera en sueños.
Puedes esforzarte en ser como ellos, pero no procures hacerlos semejantes a ti.
Porque la vida no retrocede ni se detiene en el ayer.
Tu eres el arco del cual tus hijos, como flechas vivas son lanzados.
Deja que la inclinación en tu mano de arquero sea para la felicidad!!"

Monday, January 04, 2010

letras de Bayly, deuda del 2mil9 que se fue


y aunque ya pasó y lo leí y flasheé porque es groso, jugado, valiente, amoroso y apasionado,

le debo a mi blog unos párrafos de "El canalla sentimental" de mi querido Jaime Bayly:

"Nunca me había sentido tan amigo de un hermano y tan hermano de un amigo. Era un hallazgo que no dejaba de alegrarme en cada pequeño momento que compartíamos..."


"Le pregunto si sabe lo que tiene que hacer con mi ropa interior cuando me muera. Me dice: "¿Con tu ropa interior?" Le digo: "Si, con mi ropa interior. La mandas al Opus Dei como prueba de que tuve vida interior"."


"Lo curioso de las peleas amorosas es que a veces se originan por las situaciones más inocentes o por malentendidos absurdos o por sospechas que están divorciadas por completo de la realidad.

Los amantes que más se aman pelean a menudo no por falta de amor sino por exceso de amor, que es como una droga que los intoxica y los hace ver alucinaciones peligrosas."


"Montado en bicicleta he recordado que una vez le escribí a mi padre desde Madrid una carta en inglés y he pensado que tal vez fue una manera de decirle que si no podíamos ser amigos en español, tal vez podíamos intentarlo en inglés, pero él nunca respondió.


Montado en bicicleta he pensado que en mi familia hay una tradición por defender causas equivocadas (mi tío, al dictador cubano; mi abuelo, al dictador chileno; mi madre, al Opus Dei; mi padre, a los golpes militares) y me he preguntado si no me ocurrirá que después de pasarme media vida diciendo que soy bisexual terminaré descubriendo, ya tarde para desmentirlo, que lo que necesito desesperadamente es que un hombre me ame como no me amó mi padre, pero que tener sexo con un hombre no me interesa mayormente".


"" - A Juan lo quiero como a un hijo". Cuando dice eso, admiro la sabiduría de esa mujer que cree en Dios pero también en la alegría y en el amor, en todas las formas de amor".


"Me conmueve que me diga que asi está bien, que todo lo poco que tengo, que no lo he ganado trabajando sino fingiendo que trabajo (lo que no deja de ser un trabajo, la trabajosa simulación de un trabajo), debo dejárselo a mis hijas, en compensación por la considerable dificultad que debe de entrañar la ardua tarea de ser mis hijas."


¡¡es muy genial!!