"El puerperio es un estado emocional ligado a la alteración de la conciencia.
El puerperio, como realidad emocional, persiste mientras continúa la fusión emocional. Es decir, los dos primeros años. Mientras navegamos en el "yin" del mundo sutil del bebé.
La conexión con los mundos sutiles nos ofrece herramientas fabulosas. Percibimos lo que es invisible para los demás. Sentimos lo que otros no sienten.
Las mujeres que se entrenan para sumergirse en el mundo emocional fusional aprenden la dulzura de sus aguas, la fluidez del contacto y el susurro de los pájaros. No hay apuro... Todo niño bien maternado tendrá curiosidad por explorar el mundo después de los dos años de edad.
Es ese tiempo lento, pasivo, sin bordes, sin apuro, sin horarios. lo que posibilita el maternaje. La supervivencia de la especie depende de la capacidad de fusión ligada al silencio y a la pérdida de referentes externos. Tiene que ver con el agua, la noche, la lluvia y las estrellas. Con la quietud, la imaginación, el mundo onírico y la más increíble resonancia con la inmensidad del universo.
Los tiempos fusionales son tiempos regidos por las necesidades y demandas del bebé, que "no tienen explicación" y que parecen no acabar nunca. Son tiempos interiores, cálidos, seguros, curvos, suves, silenciosos. Son tiempos de la sombra, regidos por mundos sutiles, por las emociones, el contacto, los abrazos, la leche, los fluidos, el calor, los excrementos, el cuerpo a cuerpo."
Personalmente quiero agregar que son tiempos exigentes, difíciles, contradictorios, ambivalentes, en los que el contacto con los otros por momentos se complica bastante.
No es fácil, cuando hay hermanitos chiquitos a los que también cuidar y sostener, entrar y salir de los estados fusionales, hasta puede resultarnos agotador y por momentos sentirnos en encrucijadas imposibles.
Las sensaciones de soledad a veces son enormes incluso y paradójicamente siendo que tenemos varios niños alrededor.
La vulnerabilidad que se siente es inmensa, el horizonte se desdibuja permanentemente, podemos llegar a sentirnos absolutamente perdidas más que nunca en este mundo.
vos lo entendés mejor que nadie!!!!
ReplyDeletemucho amor desde acá!!!! y para vos y tus tres hijitos!
Ximena: es tan extraña esa soledad que se siente y se siente a traves de los meses. Mi juani tiene ocho meses y juntas estamos atravezando esa " famosa crisis del octavo mes " Mucha angustia, mucha soledad acompañada, ( es paradojico pero muy real ), mucho llorar de ambas y mucho crecer y aprender juntas. Cuanta verdad la de Laura Gutman. saludos y que Felix siga creciendo con tanto amor. Monica.
ReplyDeleteNo sé, lo que primero pienso es que ,tenés recursos,me parece para no enloquecer...a ver todos estos pensamientos,sentires,mas que pensamientos que tan bien volcás acá no pasan como el viento por tu interior,seguro que algo de eso va sirviendo no?
ReplyDeleteIgual,absoluta empatía ,el puerperio es así como lo relatás.
Yo lo que mas hacía era abrazar a mi bb y llorar largo y tendido...me quedaba como "sedada" con mucho sueño,entonces lo seguía abrazando ,le daba la teta y nos dormíamos...
una de las cosas a las que mas miedo le tengo de un tercer hijo es al Puerperio...PORQUE YA LO PASE Y NO MUY BIEN QUE DIGAMOS...me costó mucho salir a flote,mucho,de verdad.
Ximena,
ReplyDeleteQué cierto todo lo que decís. Recuerdo que incluso llorábamos los tres juntos: mi hijito de 3 añitos que me necesitaba de manera exclusiva como solía ser, mi bebé recién nacida y yo...
Paz tiene 7 meses y siento todavía el puerperio. Tanta intuición desarrollada, tanto sostén mutuo, porque ella también me sostiene, me hace releer todo de nuevo, me hace sentir una inmensidad en la entrega, en seguir amamantándola, en dormir conmigo tan abrazaditas... Ya "debería" dormir en su cuna? Yo siento tanto esta necesidad de las dos...
Besos para esa mujer tan llena de vida que sos!
Maisa
Ximena, es tan cierto lo que decís. Recuerdo que llorábamos los tres: mi hijiito de 3 años que me necesitaba de manera exclusiva como solía ser, mi bebé recién nacida y yo... Paz tiene 7 meses y todavía siento el puerperio. Tanta intuición desarrollada, la inmensidad de la entrega, la templanza de seguir amamantándola, el dormir juntas y tan abrazaditas... "Debería" estar durmiendo solita? Yo siento tanto esta necesidad de las dos...
ReplyDeleteMucha fuerza para esa mujer llena de vida que sos!
Maisa
Hola, Ximena.
ReplyDeleteTengo 32 años, mi compañera tiene 29 y tenemos una nena de 7 meses que se llama Vera y un nene de 3 años y medio que se llama Camilo.
Soy papá, varón, por lo tanto no puedo "saber" fehacientemente lo que sienten ustedes.
Sin embargo trato de hacer todo lo que está a mi alcanze para entender a mi compañera cuando la veo, digamos "rara" (aunque si le llego a decir que está rara, me mata).
Me gustaría, cuando sea, cuando puedas, cuando quieras, que postees algo (tuyo o no, no sé) sobre eso, sobre el "papel" del papá no tanto para con los hijos, si no para con la mamá.
Creo que el día que los varones reconozcamos que somos bastante animales (en el mal sentido de la palabra) podemos empezar a comunicarnos de una manera mucho más mágica con hijos/as y madres.
un saludo, hermosos tus nenes.
Pedro Galimberti.-
XIME!!!!TENGO A MANO SIEMPRE UN TEXTO DE TU ALE,SE LLAMA "VISIONES DE LA MUJER"(sabés cuál es no ?...Comienza diciendo una obviedad-"Todos venimos al mundo a través del cuerpo de una mujer..."-
ReplyDeleteCREO QUE ES MAS QUE OPORTUNO,ADEMAS DE SABIAS PALABRAS,ME GUSTO CUANDO NOS LLAMA
-"Las Houdini de la existencia"
Se lo he leído a muchas mujeres y lo leo cada vez que puedo.Cariños y gracias,siempre.
Termine de leer los libros de Laura Gutman el día anterior a que naciera mi beba, que hoy tiene un mes y medio de vida. No me suplieron las sensaciones, las vivencias y procesos de este tiempo, porque no hay nada que pueda anticiparse, ni prepararse desde el raciocinio. Pero sí me posibilitaron una mirada distinta, más comprensiva y de aceptación. Siento un abismo entre "el adentro" que vivo día a día en mi casa con mi beba y la vorágine del mundo exterior.
ReplyDeleteRecomiendo los tres libros de Laura Gutman.
Gracias Ximena por abrir este espacio de compartir.
¡¡GRACIAS A TODOS POR LA EMPATÍA!!
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